Thursday, September 21, 2006

Jazz en la Universidad Nacional
Erb_Gut: Un sonido salvaje


La música me sacaba del tiempo, aunque no es más que una manera de decirlo. Si quieres saber lo que realmente siento, yo creo que la música me metía en el tiempo. Pero entonces hay que creer que este tiempo no tiene nada que ver con…bueno, con nosotros, por decirlo así.
“El Perseguidor”, Julio Cortázar


Mi primer apunte en – y para – la Caravana tiene que ver con la banda de jazz suiza Erb_Gut. Anoche, escuché un fabuloso concierto de esta banda que tuvo lugar en el auditorio León de Greiff de la Universidad Nacional, como parte de los eventos gratuitos y abiertos a todo el público que se vienen realizando durante la Semana Cultural Universitaria 2006. Sin conocer absolutamente nada acerca de la banda, Liliana y yo decidimos, más por instinto que por otra cosa, hacer la fila con la rara certeza que algo muy bueno podría suceder. Y efectivamente así fue.

Ahora, un día después, plasmar en palabras lo que pasó ayer dentro de ese auditorio resulta una tarea sinsentido. No hay nada que hacer: la música sobrepasa todo intento del lenguaje por describirla y cada tentativa por hacerlo es una derrota anunciada, un balbuceo innecesario. Por eso, y una vez hecho el reconocimiento de que lo dicho aquí no pretende de ninguna manera revivir la descarga de energía de anoche y mucho menos reemplazarla, me quiero limitar a transmitirles la emoción de haber estado allí.

Luego de una espera de más de dos horas, en las que el despiadado viento bogotano azotó a quienes esperábamos con más ansiedad que paciencia el concierto, a eso de las ocho y media de la noche se abrieron las puertas del León de Greiff para dar paso a una ‘montonera’ de gente que prefirió empujar y entrar a las patadas, antes que terminar viendo el espectáculo desde una pantalla afuera.

Con un lleno total, el quinteto suizo integrado por un saxofonista (Christoph Erb), un trompetista (Peter Schärli), un guitarrista (Markus Stalder), un bajista (André Pousaz) y un percusionista (Fabián Kuratli), inició su vertiginoso recorrido por los pasillos del jazz contemporáneo. Sin dar tregua alguna, nos mantuvo, desde el comienzo hasta el fin, suspendidos, absortos en el tiempo de su música. Las dos horas que duró el concierto desaparecieron entre las combinaciones de líricas melodías y poderosas digresiones poco ortodoxas.

Como ya dije, no voy a caer en el error de intentar describirles lo que fue presenciar esos salvajes e indómitos solos o esas sórdidas e intempestuosas improvisaciones. Sería inútil hablarles del sonido único que produce el acelerado dúo de Erb y Schärli o del escandaloso diálogo que emana entre el bajo de Pousaz y la percusión de Kuratli. Prefiero no fracasar, no estropear con torpes palabras la interpretación innovadora de temas cargados de redundantes y exageradas interjecciones, de asimétricas tonadas y ritmos disonantes. El vasto universo de Erb_Gut, como todo universo musical que se respete, no merece ser reducido a simples adjetivos que en sí mismos no logran ponerle la piel de gallina a nadie o hacer gritar como locos a millares de personas.

De todas maneras, cómo quisiera contarles lo que fue ver a Erb, el saxofonista, aferrándose a su instrumento de una forma tan apasionada, tan provocativa, tan lujuriosa, tan violenta y cariñosa a la vez. Lo que fue ver a Schärli hundiendo sus dedos en la trompeta a velocidades insospechables. Lo que fue saberse metido en los tempos de la batería y el bajo, lo que fue, lo que fue, lo que fue…

Salimos exhaustos, con poco que decir y directo a un bar a pasar ese brutal maremoto de incesantes ráfagas de sonidos con un trago de cerveza amarga. Me sentía atolondrado, un poco como Bruno en "El Perseguidor", ese maravilloso cuento de Cortázar, cuando dice sobre Johnny: "pienso melancólicamente que él está al principio de su saxo mientras yo vivo obligado a conformarme con el final. Él es la boca y yo la oreja, por no decir que él es la boca y yo..."
Durante el resto de la noche nos parecieron tan poca cosa las palabras que preferimos dejarlas guardadas. Estábamos agotados.

Nota: Si quieren conocer más acerca de la banda y ‘bajar’ gratis algunas canciones, esta es la página güeb: http://www.erbgut.ch/

3 Comments:

Blogger Andrés said...

Señor Basurero,

¿Pudo usted presenciar a esta banda? Cuando se presentaron en Bogotá, mencionaron que venían de una gira en Bolivia así que quizá usted también haya podido verlos.

1:37 PM  
Blogger RONALDO said...

Efectivamente colega... estuvieron en el boliche de un amigo mío: el 'Club de Jazz'. Seguramente también tocaron en el prestigioso 'Thelonious Monk' de La Paz. Desgraciadamente ese día yo estaba de concierto con el proyecto que les compartiré en mi entrada próxima. Es una pena no poder haberlos visto en vivo.

7:45 PM  
Blogger RONALDO said...

...ha notado usted la cantidad de veces que he utilizado palabras terminadas en mente?
Me resultó un poco perturbante'mente'.

2:26 PM  

Post a Comment

<< Home